En el mundo digital de hoy, los niños se enfrentan a oportunidades maravillosas para aprender y divertirse, pero también a riesgos que pueden parecer inofensivos a simple vista. Uno de los más comunes es el fraude digital, que muchas veces se disfraza de juegos, premios o regalos irresistibles.
El siguiente cuento, protagonizado por Trini, muestra de manera sencilla y entretenida cómo un error aparentemente pequeño —como confiar en un anuncio engañoso— puede traer consecuencias importantes para toda la familia. La historia no solo busca entretener, sino también invitar a la reflexión: ¿cómo podemos enseñar a los más pequeños a navegar con seguridad y a desconfiar de lo que parece “demasiado bueno para ser verdad”?
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